¿Se puede viajar con niños?

No sé vosotros, pero os habéis planteado si, se puede viajar con niños? Desde mi punto de vista, por supuesto! Es más, creo que viajar y niños no son para nada dos conceptos inasumibles por mucho que haya gente que lo vea así.

 

VIAJAR ES VIVIR

Personalmente, me encanta viajar. Me da igual ir a Cuenca, que a un museo de mi ciudad o irme a la Patagonia. Viajar es mi fuente de energía y una de las mayores fuentes de motivación para el día a día…

Cuando aún no tenía hijos, la gente siempre me decía «aprovecha, que cuando haya niños, adiós. Mírame a mí»… Perdona???? Pero si tú no has viajado NUNCA, ni con hijos ni sin hijos, ni joven ni adulto ni nada… Encima te tocaba callar y decir, «No creo, fijo que seguiré viajando», y aguantar sus caras de listillos.

Pues os equivocabais!

 

Claro que se puede y debe viajar con niños.

Es más, lo recomiendo aunque pueda resultar estresante a veces… pero vamos, igual que estar con ellos en casa.

 

 

Nuestro primer viaje… fue a Potes (Cantabria). íbamos con mucho miedo, y recuerdo que buscamos antes de ir la dirección del centro de salud y a cuántos minutos nos pillaba por si acaso… pero porque nuestra hija mayor tuvo un nacimiento y primeros meses complicados, y evidentemente, nos daba miedo todo! Pero a los 5 meses, para Potes que nos fuimos y tan felices que estuvimos los tres disfrutando en la naturaleza, a pesar del frío!

Y de ahí… a Malta con 18 meses! Nuestro gran primer viaje fuera de España. De hecho fue allí donde se lanzó a andar solita, es así de especial ella! A partir de ahí… siempre que hemos podido, hemos seguido viajando por nuestro país y por el mundo… y eso que os aseguro que en nuestro caso es casi cabezonería… pues en muchos sitios, terminamos conociendo hospitales y centros médicos… de eso quizás os hablé otro día, de cómo es la sanidad según el lugar de España jajaja.

Pero somos así.

Viajar nos fascina

Al igual que a otros les encantan los videojuegos o la ropa o los coches… para nosotros lo principal es viaja, descubrir.

Ahora somos 4, y este verano nos hemos ido por nuestra cuenta y riesgo 50 días a recorrer Ecuador – Perú – Bolivia… de las mejores experiencias de mi vida sin lugar a dudas! No os voy a engañar y decir que es fácil, por qué no. Hay que tener muchaaa paciencia y muchas ganas. Porque si para un adulto los viajes en avión o bus se hacen largos, imaginar para dos enanas! Además no puedes imponer un itinerario o plan de viaje estricto, pues ellas también necesitan su tiempo de juego, de calma… Estoy segura que hay sitios que quedaron pendientes por ir con ellas, pero también sé que gracias a ellas, disfruté de momentos mágicos en lugares inolvidables! Y me quedo con verlas súper unidas después de esta experiencia o con sus comentarios cuándo se acuerdan de cosas allí vividas…

Aunque ojo, en la mayoría del viaje apenas encontramos familias viajeras y las que había, con niños mayores. De hecho, muchos nos miraban alucinados por ir con dos niñas (una de menos de 3 años) desde el otro lado del océano… Pues no, mi sueño es viajar pero el otro son mis niñas, y compartir con ellas lo que veo y siento, para mi es indiscutible. No concibo viajar sin ellas, por mucho que a veces me puedan estresar o no me dejen disfrutar de ciertas cosas… son mi vida.

 

 

Creo que para los niños es importante viajar también, les abre la mente y les hace ver la vida de una forma completamente diferente… Verlas jugar con niños con los que a lo mejor no comparten ni idioma, pero se comunican y ríen… o contemplar sus caras de asombro al ver lugares extraños… o sus caras al probar sabores diferentes… No sé, pienso que es un complemento esencial a su formación, el ser conscientes que no son el ombligo del mundo o aprender a ser tolerantes con los demás o no ver al de fuera como un extraño…

 

En mi caso, puedo afirmarlo. Viajar me hace mejor persona, valoro más lo que tengo, lo que soy y a quién me rodea. A menudo te sientes como una hormiguita dentro de un inmenso mundo por descubrir, y creo que eso hoy en día sería muy recomendable que lo pensáramos muchos… y es que yo no soy de aquí ni él es de allí… ahora estoy aquí, mañana la vida a saber dónde me coloca.

Si estás leyendo esto, puedes pensar que para viajar hace falta dinero, si y no. Para mi viajar y abrirme a otras experiencias o culturas, es también visitar un museo de mi ciudad o admirarme ante las bellezas construidas en el pasado que nos pillan muy a mano a veces, y tantas veces pasamos de largo…

 

Así que: VIAJA. DISFRUTA. VIAJA EN FAMILIA… Te animas?